Confirmaciones 4 de junio
ENTRADA
Reunidos en el nombre del Señor
Reunidos en el nombre del Señor
que nos ha congregado ante su altar,
celebremos el misterio de la fe
bajo el signo del amor y la unidad. (2)
Tú, Señor, das sentido a nuestra vida,
tu Presencia nos ayuda a caminar,
tu Palabra es fuente de agua viva,
que nosotros sedientos a tu mesa
venimos a buscar.
Purifica con tu gracia nuestras manos,
ilumina nuestra mente con tu luz,
que la fe se fortalezca en tu Palabra
y tu cuerpo tomado en alimento
nos traiga la salud.
ASPERSIÓN
Este es el día (Sal 117)
Este es el día en que actuó El Señor:
sea nuestra alegría y nuestro gozo.
Dad gracias al Señor porque es bueno,
porque es eterna su misericordia
¡Aleluya, aleluya!
Que lo diga la casa de Israel:
es eterna su misericordia.
Que lo diga la casa de Aarón:
es eterna su misericordia.
Que lo digan los fieles del Señor:
es eterna su misericordia.
Escuchad: hay cantos de victoria
en las tiendas de los justos:
“La diestra del Señor es poderosa;
es excelsa la diestra del Señor.
La diestra del Señor es poderosa;
es excelsa la diestra del Señor”
Abridme las puertas del triunfo,
y entraré para dar gracias al Señor.
Esta es la puerta del Señor:
los vencedores entrarán por ella.
Yo no he morir, yo viviré
para contar las hazañas del Señor.
Gloria
CRISMACIÓN
Invocación al Espíritu Santo
Desciende Santo Espíritu
a nuestras mentes manda tu luz;
envíanos tu gracia,
del universo Creador.
Tu eres llamado Paráclito
y don de Dios Altísimo;
fuente viva, fuego y amor,
unción del Espíritu.
Envíanos tus dones
Omnipotente Espíritu,
inspíranos en nuestro hablar
como el Señor nos prometió.
Nuestros sentidos ilumina;
infunde amor en el corazón,
da consistencia al ánimo
de nuestra débil condición.
De todo mal líbranos
concédenos pronto la paz;
contigo queremos vencer
todo peligro mortal.
Revélanos a Dios Padre
y al Hijo Unigénito
que todos crean por siempre en ti,
oh Creador Espíritu
ahora y siempre. Amén.
Hombres nuevos
Danos un corazón grande para amar
danos un corazón fuerte para luchar.
Hombres nuevos, creadores de la historia,
constructores de nueva humanidad.
Hombres nuevos que viven la existencia
como riesgo de un largo caminar.
Hombres nuevos, luchadores de esperanza,
caminantes, sedientos de verdad.
Hombres nuevos, sin frenos ni cadenas,
hombres libres que exigen libertad.
Hombres nuevos, amando sin fronteras,
por encima de razas y lugar.
Hombres nuevos, al lado de los pobres,
compartiendo con ellos techo y pan.
El Señor es mi luz
El Señor es mi luz y mi salvación,
el Señor es la defensa de mi vida.
Si el Señor es mi luz, ¿a quién temeré? ¿Quién me hará temblar?
Una cosa pido al Señor:
habitar por siempre en su casa,
gozar de la dulzura del Señor,
contemplando su templo santo.
No me escondas tu rostro, Señor,
buscaré todo el día tu rostro.
Si mi padre y mi madre me abandonan,
el Señor me recogerá.
Oh, Señor, enséñame el camino,
guíame por la senda verdadera.
Gozaré de la dulzura del Señor
en la tierra de la vida.
OFERTORIO
No adoréis a nadie
No adoréis a nadie, a nadie más que a Él,
No adoréis a nadie, a nadie más que a Él,
No adoréis a nadie, a nadie más,
No adoréis a nadie, a nadie más,
No adoréis a nadie, a nadie más que a Él.
No escuchéis a nadie…
No pongáis los ojos en nadie más que en Él….
Porque solo Él nos puede sostener,
Porque solo Él nos puede sostener,
No adoréis a nadie, a nadie más,
No escuchéis a nadie, a nadie más,
No pongáis los ojos en nadie más que en Él.
COMUNIÓN
Ave María
Ave María esplendor de la mañana
eres humilde y pura es tu mirada,
protege nuestro pueblo en camino
con la ternura de tu fiel amor.
Madre mi corazón quiere mirarte,
haz que pueda escuchar siempre tu voz,
permítenos llevar tu paz a todos
que puedan conocerte y amarte.
Madre tu que nos cuidas como a hijos
haz que ningún dolor se pierda en vano,
lleva esta compañía hacia el destino
por ti se engendre aquí tu rostro humano.
Madre mi corazón…
Ave María esplendor de la mañana
eres humilde y pura es tu mirada,
protege nuestro pueblo en el camino
con la ternura de tu fiel amor.
Protege nuestro pueblo…
Id y enseñad
Sois la semilla que ha de crecer,
sois la estrella que ha de brillar.
Sois levadura, sois granos de sal,
antorcha que ha de alumbrar.
Sois la mañana que vuelve a nacer,
sois espiga que empieza a granar.
Sois aguijón y caricia a la vez,
testigos que voy a enviar.
Id amigos, por el mundo
anunciando el amor,
mensajeros de la vida,
de la paz y el perdón.
Sed, amigos, los testigos
de mi resurrección,
id llevando mi presencia,
con vosotros estoy.
Sois una llama que ha de encender
resplandores de fe y caridad.
Sois los pastores que han de guiar
al mundo por sendas de paz.
Sois los amigos que quise escoger,
sois palabras que intento gritar.
Sois reino nuevo que empieza a engendrar justicia, amor y verdad.
Sois fuego y savia que vine a traer,
sois la ola que agita la mar.
La levadura pequeña de ayer
fermenta la masa de pan.
Una ciudad no se puede esconder,
ni los montes se han de ocultar;
en vuestras obras que buscan el bien,
los hombres al Padre verán.
ACCIÓN DE GRACIAS
Vuestra soy pues me criasteis
Vuestra soy pues me criasteis,
vuestra soy pues me redimisteis,
vuestra pues que me sufristeis,
vuestra pues que me guardasteis,
vuestra porque no me perdí,
¿Que mandáis hacer de mí?
¿Qué mandáis, oh buen Señor,
que haga tan vil criado?
¿Cuál oficio le habéis dado
a este esclavo pecador?
Veísme aquí, oh dulce Amor,
amor dulce veísme aquí,
¿Qué mandáis hacer de mí?
Veis aquí mi corazón,
yo lo pongo en vuestra palma,
mi cuerpo, mi vida y alma,
mis entrañas y aflicción.
Dulce esposo y Redentor
pues que me ofrecí.
¿Qué mandáis hacer de mí?
Haga fruto o no lo haga,
esté callando o hablando,
muéstrame la ley,
mi llaga goce de evangelio hablando.
Esté penando o gozando
sólo vos en mí vivís.
¿Qué mandáis hacer de mí?
ORACIÓN A SAN JOSÉ
Salve, custodio del Redentor
y esposo de la Virgen María.
A ti Dios confió a su Hijo,
en ti María depositó su confianza,
contigo Cristo
se forjó como hombre.
Oh, bienaventurado José,
muéstrate padre también a nosotros
y guíanos en el camino de la vida.
Concédenos gracia, misericordia y valentía,
y defiéndenos de todo mal.
Amén.
SALIDA
Gracias, Señor
Gracias, Señor, por darme en tu nombre
tantos hermanos que caminan hacia ti.
Gracias, Señor, porque has reflejado
en nuestros rostros, que nos hablan de tu amor.
La, la ,la…
Gracias, Señor, porque has puesto en el mundo
una morada y tu Reino divino;
para que podamos amarte y amarnos,
donde vayamos y hasta el fin de nuestra vida.
La, la ,la… Amén